11-06-05

Luce el sol, los pajaritos cantan, las nubes se levantan y va a caer un chaparrón.

La otra madrugada, durante un momento, era feliz. Reinaba el silencio y se podía oír como el aire se mecía entre las hojas de los árboles. Momentos como ese son los que marcan la diferencia de un día a otro. Para otr@s puede ser comprarse unos pantalones... Chacun fait c'qu'il lui plait, dicen...

Hasta que el frío rompió la magia. El céfiro se volvió inclemente y sin ninguna piedad se colaba por los balcones, empecinado en enfriar el ambiente reinante. Claro que una es mujer de recursos y encontró mejor sitio para aposentarse.

Lo mucho que vale un momento... robándole instantes al tiempo. Si sabré yo de hacerle “moros” al tiempo! Una carrera contrareloj al mas puro estilo vuelta ciclista.

A veces ocurre que nos sentimos como los niños perdidos y tenemos que recuperar nuestras canicas, o bolas de dragón, aunque las nuestras no sirvan para resucitar personajes, que hay algunos que más vale dejarlos muertos y enterrados. A veces las mías las tiene Azrael, el gato de Gargamel, que las ha confundido con ovillos de lana para jugar, aunque él prefiera perseguir cosas azules con gorros blancos para comérselos, y hacerse con ellas de nuevo sea una tarea bastante complicada. Comparo las canicas con las ilusiones, que se pierden pero siempre vuelven, como el turrón por navidad.

La vida es una tómbola tom, tom, tómbola... de luz y de color? O eso o el destino nos ha salido juguetón y juega al gato y al ratón con los hilos de nuestras vidas y si le caes en gracia es capaz de darte “chance” para que las cosas te salgan rodadas pero, como seas un insurrecto no te arriendo la ganancia. Sea como sea, el destino, o dios, o lo que sea, aprieta pero no ahoga y te guiña el ojo de vez en cuando, poniendo ante ti la oportunidad de tu vida. Después, como dice n0s, vienen las encrucijadas y de nostros depende lo que hagamos, que para eso existe el libre albedrío.

Al son de Rondo’ veneziano, paseo nocturno por la Venezia antigua, la de los palacios ducales, los bailes de máscaras, el misterio y Casanova.

Que los hados iluminen vuestro camino...